En Mayo se anunció que Team ASOBI estaba preparándose para la publicación de su nuevo juego, Astro Bot. Luego de una muy positiva experiencia de los usuarios con Astro’s Playroom (2020), la expectativa por este proyecto no tardó en aparecer, y finalmente este 6 de Septiembre el título se estrenó de manera exclusiva para PlayStation 5.
A modo personal es la primera entrega que puedo jugar de y en esta consola, y no puedo creer el timing porque genuinamente fue un lanzamiento que me encantó y divirtió como si fuera una niña. Incluso, hacía bastante tiempo que estaba alejada de lo que era ir por el platino, pero al empezarlo tuve el pensamiento de cuán difícil sería tenerlo al 100% y no me avergüenza admitir que al momento de escribir esta reseña sólo me quedan un par de trofeos por desbloquear.
Adentrándonos ya en su jugabilidad, tras que un malvado marciano rompiera la nave (una PS5) de los botcitos, Astro tiene la misión de rescatar a sus 300 compañeros. Para hacerlo debe recorrer en profundidad el planeta donde pudo aterrizar después del ataque, junto a otras cinco galaxias centrales. Cada una de ellas está conformada por más de nueve escenarios, entre principales y bonus, y tiene un boss al que derrotar.
A medida que vamos jugando, hay algo que se evidencia y es el cariño con el que está desarrollada la entrega. Pero incluso no sólo pensando en sus jugadores, ni en el producto en sí, sino también hacia otros factores.
Como se conoció desde el tráiler, algunos de los bots que debemos ir rescatando tienen skins de personajes de otros videojuegos de diversas compañías y sellos. La inclusión de todas esas referencias (169 y si jugamos Astro’s Playroom son 173), está realizada con simpatía y respeto, en igual proporción. Se nota el conocimiento en cada una de las franquicias incorporadas, porque todos los guiños tienen un pequeño contexto detrás; algunos más que otros, pero todos tienen alguna perlita que hacen decir “¡hey, qué copado eso!”.
Incluso, en conexión con esto comentado, se va generando un sentimiento extra y es la curiosidad por saber en base a quién estará caracterizado el próximo bot especial, junto a la elucubración que podamos hacer por la ambientación del mundo. Además de ser grato ver la unión entre compañías al prestar y, por el otro lado incluir, distintos íconos de la industria gamer. Me sorprendió no identificar alusiones a Ubisoft, ni Square Enix, pero no desestimo que se vaya agregando más contenido de este estilo posteriormente.
Adicionalmente, y en ocasión de los 30 años de PlayStation, el título resulta un bello y entretenido medio para ir celebrando ese aniversario.
Siguiendo con la idea del afecto que le han puesto a este lanzamiento, está su level design, el cual no deja de sorprender y, como si fuese el truco de magia de los pañuelos infinitos, permanece ofreciendo experiencias nuevas a lo largo del gameplay. Al comenzar la aventura se nos presentan los movimientos básicos, como saltar y atacar, pero ya al adentrarnos en el primer mapa se incorpora un power-up con una característica particular. Y así como esa habilidad especial la volveremos a encontrar en otras pantallas, también se van añadiendo otros tipos de mecánicas, manteniendo el espíritu lúdico. El diseño artístico entre los escenarios irá variando y, por cierto, me gustó que se tuviera en cuenta el voxel art; así como también que haya pequeñas cinemáticas.
Además de reunir a todos los figurines, también hay otros coleccionables a los que estar atentos. Por un lado, distribuidas en los niveles, tendremos piezas de rompecabezas. Al ir consiguiéndolas, en el "Lugar del aterrizaje" se nos habilitarán varias estaciones. Una de ellas será una máquina de gashapones, donde podremos canjear al azar las monedas que vayamos recolectando por artículos y animaciones para los bots especiales, así como atuendos para Astro, por ejemplo. También, determinados mundos tienen un portal oculto que nos llevará a una pantalla perteneciente a la “Galaxia perdida”. Para no depender de nuestra memoria, al poner pausa nos indica qué objetos hay en el nivel que estamos jugando y cuáles ya fuimos descubriendo.
Procurando que sea una entrega de alta calidad, Team ASOBI parece no haber dejado nada librado al azar y eso se demuestra en el cuidado con el que están trabajados distintos aspectos del juego. En este punto quisiera detenerme en la música y los sonidos. La banda sonora está compuesta por una alegre variedad de piezas, entre las cuales incluso hay algunas reversiones de las mismas. Teniendo presente que en los niveles se van enseñando distintas temáticas, también se tuvo en consideración que las melodías tuvieran relación con ellas. Asimismo, hay determinados stages que comparten entre sí una dinámica similar, y en ese caso el tema musical que los acompaña es el mismo.
También dentro de este apartado, hay dos puntos que resalto por sobre todo. Uno es que gran parte de la OST podría escucharse durante el día haciendo otras actividades. Y el otro es lo bien editados que están los loops. Por más que, por ejemplo, demoremos buscando los distintos coleccionables, la composición no se termina, ni se escucha un salto al volver a empezar. De hecho, si perdemos, entre que reinicia el punto de control y retomamos el juego, la canción tampoco se detiene, sino que mantiene su reproducción en curso. Como comentario aparte me causó simpatía los ruiditos que hace Astro y los otros bots, incluso por momentos se parece a Dino de Los Picapiedra. Otro detalle tenido en cuenta es que cuando nuestro personaje está debajo del agua, todo el sonido se escucha como apagado.
Como anticipaba, fuera de un partido del EA SPORTS FC en un evento, es la primera vez que estuve en contacto realmente con el DualSense y pude comprobar las ventajas que tiene. Siempre me dio curiosidad cómo serían los gatillos adaptativos y este título resultó una propuesta ideal para probarlos, porque se les da mucha participación. Además el gameplay tiene escenas, especialmente luego de vencer a un jefe, donde también otras características del joystick se vuelven protagonistas, como tener que mover el control simulando que estamos colocando un clavo. Conjuntamente, la iluminación del mando también va haciendo juego con lo que se reproduce en el monitor.
Llegando a la conclusión, creo que el estudio logró con creces traspasar lo que fue aquella demo técnica lanzada en 2020 en una entrega en sí, incorporando múltiples dinámicas, entretenidas animaciones y niveles y volviendo a demostrar todas las propiedades del control de PlayStation 5. Siento que Astro Bot sorprendió con su anuncio de estreno y vuelve a hacerlo desde el momento de darle ‘Start’ a la aventura.
Me parece que es de esos títulos donde sabés que la vas a pasar bien jugándolo, como sucede con franquicias de personajes como Crash, Sackboy y Rayman. Pienso que es una agradable propuesta para diferentes targets e incluso el hecho de que sean diversos mundos compuestos por varios escenarios, también está bueno para los jugadores más casuales, para ir superando el gameplay a su ritmo.