Nintendo fue precursora en la materia de permitir que el movimiento que el jugador realizara, se viera reflejado en la pantalla y en las acciones que el personaje ficticio hiciera. Con los años, la compañía ha ido trabajando más con esa característica, incluyéndola tanto como un pilar fundamental en ciertos gameplays, como también implementándola como una mecánica adicional de jugabilidad en otras entregas.
Siguiendo esa línea y, si me permiten la expresión, ‘destabutizando’ la imagen de que jugar es estar sentado por horas frente al televisor, se han ido publicando diferentes títulos que mantienen el objetivo de moverse y hacer actividad física de una manera lúdica. Con Fitness Boxing 3: Your Personal Trainer, la gran N vuelve a hacer entretenidos los entrenamientos y nos deja enganchados con sus seguidillas de golpes al ritmo de ‘left, right, left, right’. Luego de varias sesiones, vengo a contarles un poquito más de él.
Personalmente no había jugado los volúmenes anteriores de la franquicia, pero al ver el tráiler de lanzamiento de este nuevo me dio mucha curiosidad por probarlo. Me entusiasmó bastante considerarlo una buena manera de hacer ejercicio -más acercándonos al veranito en este Hemisferio-, luego pensé “¿realmente ofrecerá una rutina que canse?”, y comprobé que sí, que efectivamente las secuencias de movimientos que se nos van marcando, se van haciendo sentir.
En relación a ello, y como una de las características positivas que quisiera destacar primero, es el cuidado al entrenamiento que se le da. No sólo la experiencia de practicar boxeo está bien interpretada y transmitida por el título, sino que creo que le da un sello extra de profesionalismo el hecho que los personajes vayan emitiendo recomendaciones, como la importancia de ir hidratándonos mientras realizamos las rutinas y que nos tomemos el tiempo de calentar y elongar para evitar malestares. Si bien el estilo visual del gameplay, podría transmitir una sensación de juego casual o de “no tan serio”, la incorporación de esos tips —aunque parezca algo tal vez ínfimo o banal— le aporta formalidad.
Introduciéndonos en su mecánica principal, en la pantalla iremos viendo secuencias de golpes, conectadas a un ritmo musical, las que tendremos que ir siguiendo y emulando con nuestro cuerpo, sosteniendo los Joy-Con. Al finalizar cada run, de acuerdo a la precisión que hayamos logrado, se nos asignará una puntuación. A la vez, se nos compartirán otros datos como el detalle de movimientos que hayamos acertado de manera perfecta, bien y aquellos que fallamos, junto a las calorías que estimativamente fuimos quemando.
Con ello en mente, desde el menú tendremos varias opciones de estilos para ponernos en acción. En primer lugar encontramos la “sesión diaria”, la cual nos propone una serie con una variedad de ‘punches’ que deberemos ir completándola de manera espejada, es decir, primero por ejemplo con una postura con el pie izquierdo por delante, para luego rotar y tenerlo detrás. Motivando a ser constantes con la actividad, se irá marcando cada día que entrenemos en un calendario.
Otras de las opciones que este exponente nos presenta son: las rondas con manopla, donde se prioriza el trabajo del torso y los brazos sobre todo; las runs libres, mediante las cuales nosotros podemos ir escogiendo y combinando distintas rutinas; y en adición, se incorporó el modo “Guardia sentada” en el cual, como es deducible, podemos practicar sin necesidad de estar parados. Además el lanzamiento nos ofrece la posibilidad de jugar con un acompañante, de manera local.
Un apartado que caracteriza a la entrega es su capacidad de personalización. De acuerdo a nuestras preferencias y para disfrutar más de las jornadas, podremos escoger entre los distintos grados de dificultad e intensidad, la duración del training (añadiendo más series) e incluso definir una o varias partes del cuerpo que deseemos trabajar. Asimismo, tendremos la opción de modificar el escenario que veremos en pantalla, elegir al coach que más nos simpatice y también personalizar su atuendo.
De la mano de ello e incentivando a continuar en marcha, al ir completando las sesiones de box junto a las misiones diarias y semanales, se nos recompensará con monedas. Las mismas las podremos utilizar para adquirir artículos estéticos o desbloquear reconocidas melodías, para luego seguir el entrenamiento a su ritmo. En esta edición, las canciones en total son 30, siendo populares 20 de ellas.
Personalmente me gustó que los distintos golpes tuvieran su propio tutorial pero que además estuvieran representados de una manera puntual cada uno, tanto con una tonalidad como iconito diferente. Al ir entrando en práctica, ya los vamos reconociendo a medida que aparecen en el monitor y ya sabemos cómo deberemos movernos, independizándonos un poquito de las indicaciones de la figura del entrenador.
Por otra parte, imaginar un título de este género en relación a la accesibilidad, me resultaba un tanto complicado y, sin embargo, creo que tiene una vuelta interesante, aparte de la posibilidad de estar sentados. Si no podemos observar con claridad las animaciones, podemos guiarnos en proporción por el sonido y las pautas que el trainer va dando. Contrariamente, si bien a los diálogos podemos activarle el subtítulo y lo característico sea lo rítmico, como les comentaba, que los golpes se identifiquen entre sí, omite la necesidad imperiosa del audio, tanto si no podemos escucharlo o si queremos jugarlo de noche y no interrumpir a nadie.
Profundizando en la exactitud, hay que comentar que a veces el juego no distingue bien si efectuamos el movimiento correcto o uno similar y nos lo da por válido. En cuanto al timing sí sentí un mayor grado de precisión y registro.
Llegando al fin de esta reseña, si estamos buscando una propuesta que nos mantenga enérgicos y activos, Fitness Boxing 3: Your Personal Trainer (Nintendo Switch) podría cumplir muy bien con ese cometido. No les voy a decir que suple el hecho de ir al gimnasio, pero para movernos un poco en casa viene óptimo y es entretenido.
(Agradezco a Nintendo por la posibilidad de jugarlo).